Perdóname

Perdóname,
porque no he dejado de huir.
He vagado tantos meses enterrando lo que siento,
he cambiado los sueños que tenía contigo, por otros que en realidad no quiero.
Perdón por apartarte, así de golpe,
por cambiar todos los planes,
por dejarte aunque ya no me quisieras, y cuidarme.
Te escribo, aunque jamás lo reconocería.
Y te siento cuando piso calles vacías,
y espero que tal vez, al doblar esa esquina…
Perdóname por no ceder,
por ser tan fría,
por elegir quererte siempre, sin que tú lo sepas
y sin que yo te lo diga.
La nieve me abrasa por dentro.
Domingos, abriles, inviernos.
Y ese concierto…
Perdóname.
Porque yo todavía no puedo.